jueves, 11 de diciembre de 2008

XTARLINGS REDUX: GENE TIERNEY

¿CONOCES LA LEYENDA DE LA ACTRIZ
QUE UN BESO EN LA MEJILLA
DESTROZÓ SU VIDA?


La vida puede ser como un baile, sutiles movimientos que componen todos ellos un bello espectaculo de luces y sonrisas. Sin embargo, no siempre es asi, la vida puede ser oscuro y bailar una danza macabra donde el destino y la inoportunidad pueden jugarnos malas pasadas...

Así debió de sentirse Gene Tierney cuando un beso en la mejilla trastornó todo su mundo, echando a perder una vida de proyectos. Algo tan afectivo como el roce cálido de unos labios en nuestras mejillas puede ser el causante de un siniestro giro que eche a perder todas nuestras alegrias. La historia de Gene Tierney es la de una actriz cuya alegria pasó a ser malestar y las luces de su esplendor fueron apagandose una tras otras tras un maldito beso en la mejilla.

Gene Tierney nació el 19 de noviembre de 1920 en Brooklyn (Nueva York), hija de un importante hombre de negocios. Gene recibió unos solidos estudios que se enriquecían con constantes viajes a Europa.
Su belleza y carisma no tardaron en ser mostrados, convirtiéndola en el broche que más lucía de todas las reuniones de sociedad a la que asistía. Así fue cómo conoció al director Anatole Litkav que, en un fallido intento de seducción, la recomendó a los directivos de la Warner Bors y Columbia.
"Es incuestionablemente la mujer más bella de la historia del cine" - confesaba el productor Darryl F. Zanuck, deslumbrado tras conocerla.

Sin embargos, sus inicios fueron duros y habían productores que sentían que Gene sólo era una cara bonita más. Las pruebas a las que tuvo acceso por sus contactos no fueron muy fructíferas.

Sus primeros papeles fueron en películas donde la mayor carga interpretativa la tenía el interprete protagonista masculino, por lo que ella tampoco podía demostrar talento. Así inició su carrera con papeles en películas como La venganza de Frank James (1940) y El camino del tabaco (1941). Los críticos no fueron muy permisivos con ella, etiquetándola como el peor descubrimiento del año.

La Fox fue la decidida en apostar fuertemente por ella y le ofreció un contrato de exclusividad, a cambio de papeles en los que la actriz pudiese dar más de sí misma. Gene Tierney comenzó a mostrar que era algo más que infinitamente bella, con un papel de chica rebelde en La indómita (1941). Sus personajes interpretados iban cobrando vida con más fuerza, sus actuaciones eran mucho más creíbles y su nombre comenzaba a dejar de ser desconocido. Todo el mundo hablaba de sus papeles en Cuando muere el día (1941), La pecadora de Shangai (1941), El hijo de la furia (1942).



Dos películas la catapultaron al estrellato al hacer magistrales interpretaciones. En Laura (1944), Gene Tierney interpretaba a una seductora joven que tenía varios amantes y uno de ellos la asesinaba, cine negro de adivinar quién fue el asesino, película en la que Gene cargó de misterio a su personaje. Que el cielo la juzgue (1945) fue su mayor apuesta, incluso nominada al Oscar por su interpretación. Gene realizaba una creíble transformación a una perversa mujer manipuladora que hacía cualquier cosa por obtener lo que quería y disfrutando al atormentar a su marido.
Su personaje de mala malísima sorprendió a todos y, esta vez, todos los críticos al unísono aplaudían su interpretación. El Oscar a Mejor Actriz fue finalmente para Joan Crawford en El suplicio de una madre (1945) pese a que Gene era de las favoritas entre el público.
Su sinopsis era la siguiente: El escritor Richard Harland se enamora de una joven llamada Ellen Berent, la cual abandona a su prometido para casarse con él. Todo parece ir bien hasta que Ellen revela una personalidad obsesiva. No es capaz de asimilar que haya otras personas alrededor de su marido. Su mismo título lo dice todo, era una chica tan mala que mejor que el cielo le echara la reprimenda, nadie terrenal era capaz de plantarle cara.

Tras el gran éxito, Gene Tierney destaca por sus papeles en El filo de la navaja (1946), donde Gene vuelve al cine negro y "La dama y el fantasma" (1947), donde interpreta a una viuda que se enamora del fantasma de un capitán de barco.

Poco después, la actriz lo pasa muy mal cuando se enamora del príncipe playboy y seductor Aly Khan, el cual también conquistó el corazón de Rita Hayworth. Fue un amor difícil y tormentoso que hizo que la actriz se alejara lentamente del celuloide, sus papeles iban esparciéndose y ella no parecía estar muy centrada en los rodajes. Ali Khan era un seductor y sabía enamorarlas con su exótica personalidad, sin embargo, no parecía tener previsto tener algo serio con ella.

A ese desengaño amoroso, se le une un trágico suceso que la lleva al borde del fracaso. Un incidente o una mala jugada de la casualidad, un beso en la mejilla que destruye su vida lentamente cual terrible enfermedad. Cuando una admiradora besó efusivamente a la actriz, ésta no se percató de que la señora padecía la rubéola.

Si una mujer se infecta de rubéola durante el primer trimestre de su embarazo la probabilidad de que su bebé nazca con daños permanentes causados por este virus es de 85 por ciento. La rubéola causa ceguera, sordera, defectos del corazón y retraso mental.


Gene Tierney se encontraba embarazada de su diseñador de vestuarios y la niña nació con un retraso mental, debido a aquel beso en la mejilla que contagió el virus a la actriz. Gene fue algo que nunca se perdonó, se sentía muy mal por no haber evitado aquel fugaz momento, ese beso de una desconocida que trajo consigo tan graves consecuencias.
Fue un suceso que la hundió, justo en un momento débil de su vida tras no haber superado del todo su noviazgo con el príncipe rompecorazones. Gene se internó en un sanatorio mental por voluntad propia, culparse o culpar aquel momento del retraso con el que había nacido su hija era imperdonable para ella y era algo que la enfermaba. La actriz pidió ayuda cuando los ataques de pánico se repetían con frecuencia. En aquel sanatorio, Gene vivió un auténtico infierno. Los doctores la mandaban frecuentemente a terapias de electroshock.

La actriz se mantuvo largos años alejada del cine, entregándose a fondo en su recuperación y tras rechazar papeles que no acababan de parecerles tentadores. Realizó dos películas más para la Fox, quizás en deuda por ser la productora que apostó por ella, y volvió a retirarse.

La actriz dedicó sus últimos años a escribir en un diario de Houston sus propias investigaciones para el estudio de la salud mental y organizó recaudaciones de fondos de ayuda para niños que necesitan educación especial. Muy conmocionada por sus vivencias, Gene quería ayudar como hicieron con ella en aquel momento desesperado de su vida, en aquella pérdida de identidad y hundimiento que empezó con algo tan simple como un beso en la mejilla.

En 1991, Gene Tierney falleció a consecuencia de un enfisema a sus setenta años.

19 comentarios:

El chache dijo...

Joder, menuda historia, y menuda putada.
Pobre chica.
A eso le llamo yo mala suerte.
Un saludete

Mekhi dijo...

Qué fuerte lo de Gene Tierney... con lo que me gusta el cine clásico y desconocía lo que le pasó a esta actriz...
Qué fuerte... por un beso... qué fuerte

Anika dijo...

¡Qué leyenda más curiosa! No tenía ni idea, curiosa y triste a la vez, me parece increíble.
Bueno, ante todo saludarte, he conocido tu blog a través de "renombrando los días" y me parece que te visitaré bastante.

Un besito

Salva dijo...

El chache,
buf, la verdad es que sí, da miedo pensar con que tampoco puede cambiar trágicamente nuestras vidas...

Mekhi,
yo también comparto tu interés por el cine clásico, me da pereza verlo pero me gusta redescubrir viejas joyas

Anika,
bienvenida a Xtarlings, me alegra que te haya gustado, veo que también tienes un blog muy simpatico que también pasearé por él

un abrazote a todos!

Unknown dijo...

No conocía la historia, pero me parece el colmo de la mala suerte. Qué pena que sin comerlo ni beberlo su vida se hundiera de esa manera.

Salva dijo...

... y encima por ser afable con una fan... es una pena, da pena, la verdad... q irónico, la mujer que encarnó a una perversa en "que el cielo la juzgue" y lo humana q era en realidad.
un abrazo!

Anónimo dijo...

claro que es muy mala suerte, pero tb creo k la mujer era un tanto paranoica, el niño podia haber nacido igual con retraso...y si todas las madres k tienen hijos con problemas de ese tipo hicieran lo mismo...estabamos apañados!!
Es una putada el porque de salir con ese problema, pero una vez que se tiene a echar palante y a quererla igual, no alejart del bebé ingresandote

Anónimo dijo...

Una historia muy interesante. Qué angustia vivir atormentado por algo tan nimio toda tu vida... aunque me imagino que en sus últimos años se reconciliaría consigo misma con su labor social. Nos quejamos por muchas tonterías que habría que relativizar porque está claro que los problemas de verdad vienen solos y cuando menos te lo esperas.

Salva dijo...

Anónimo,
estoy de acuerdo contigo, el hijo es una desgracia que haya nacido asi pero no tiene culpa y debía de haber estado ahi, pero mira, el problema le vino grande...

Javi,
Exacto, historias asi nos hacen pensar que muchas veces nuestros quebraderos de cabeza son por cosas banales...

un abrazo a ambos!

caotico_jq dijo...

Ostras, pobre mujer... de piedra me has dejado. Pues no sabía yo que la rubéola fuera algo tan serio, la verdad (supongo que ahora debe ser diferente...).

A mí Pe ni me cae ni me deja caer, sinceramente, en ese sentido me parece más gilipollas Bardem... pero en ambos casos creo que, independientemente de su actitud con la prensa, son unos actores como la copa de un pino.

Un beso y feliz viernes.

Salva dijo...

Feliz viernes, caotico!!!

Anónimo dijo...

Esta historia es tristisima!!!!!!Pobre chica! la verdad es que nadie puede imaginarse que por un simple beso en la mejilla puedan ocurrir cosas así...espero que ese virus haya dejado de existir...por la parte que me toca, claro!
saludossssssssssssssss

Salva dijo...

... creo que sí, Ava, me parece que ese virus está bastante controlado, creo yo, je
y si, es muy triste, pobre mujer!
besos!

Anónimo dijo...

la rubeola esta controlada pk nos ponen la vacuna, solo a las niñas y por esa razon, pk a ti no te hace estar tan mal

Salva dijo...

Muchas gracias por la informacion!!!

Anónimo dijo...

Una auténtica pena. Estas mujeres de mediados de los 40, como Lauren Bacall, significan para mi el ideal de la mujer guapísima, porque lo eran. Gene Tierney es para mi una de las mujeres más guapas que han existido en el cine.

saludettes!

Salva dijo...

Honestamente, creo que las actrices de ahora ninguna tiene el carisma de estas actrices, se las echo de menos
un abrazote!

Anónimo dijo...

Muy buen articulo, estoy casi 100% de acuerdo contigo :)

Anónimo dijo...

Felicitaciones, muy interesante el articulo, espero que sigas actualizandolo!