SHIRLEY MacLAINE

Las obsesiones son pensamientos que se repiten de forma insistente a pesar de la voluntad del individuo, algunas obsesiones nacen de una simple curiosidad y, en ocasiones, pueden dañar nuestras vidas más de lo que imaginamos.

Shirley MacLaine, hermana mayor del también actor Warren Beatty, se dio a conocer tras su formidable interpretación en la película “¿Quién mató a Harry?” del maestro del suspense, Alfred Hitchcock. La carrera cinematográfica de Shirley MacLaine fue reconocida al ser nominada cinco veces a los Oscars, ganando una de ellas en 1983, “La fuerza del Cariño”. Esta emprendedora actriz ha sido siempre distinguida como alguien que se toma muy en serio su trabajo y que se dedica con mucho énfasis a sus interpretaciones.

Sin embargo, esta actriz no sólo es conocida por sus películas, Shirley comparte su pasión por el cine con una gran curiosidad y dedicación sobre los temas paranormales. Una curiosidad que lentamente se ha ido desarrollando como una obsesión de la que ha habido damnificados.

Shirley MacLaine necesitó nuevas formas de ver la vida cuando vivió un duro trago tras una dolorosa separación. La actriz estuvo casada hasta 1982 con Steve Parker, un hombre de negocios que resultó no haber sido muy honesto. Shirley y Steve tuvieron una hija en común, Sachi Parker, y fruto de la felicidad con la que había transcurrido aquel matrimonio hasta aquel momento. En 1982, Shirley decide divorciarse de su marido cuando descubre que Steve le había mentido sobre su infancia en Japón, que realmente lo que tenía allí era una amante a la que le estaba transfiriendo todo el dinero que ella iba ganando. La actriz se sintió muy perdida tras ver cómo su matrimonio de casi treinta años se reducía a la nada y sentía un gran interrogante al no saber cómo encauzar su nueva vida.

Es en ese instante cuando Shirley comienza a incrementar su dedicación a los temas esotéricos, sintiendo una mayor curiosidad por el tema de las reencarnaciones. La actriz siempre había tenido una mente abierta a la hora de conceptualizar la vida y se sentía satisfecha de haber encontrado remedio a pequeños males en el mundo de la metafísica. Shirley padecía un atroz miedo escénico que le hizo pasarlo muy mal en sus primeras interpretaciones, temiendo que ese problema la apartara del todo de su sueño por ser una gran actriz. Shirley visitó un acupunturista en Nuevo México y se sometió a un tratamiento. En aquel viaje, que luego relataría en su libro publicado "Lo que sé de mí", la actriz cuenta que tuvo el placer de conocer sus anteriores vidas. MacLaine descubrió que ella había sido un bufón de una corte del siglo XVIII en una de sus vidas pasadas y que tuvo un trágico final cuando le decapitaron. Shirley afirma orgullosa haber sido capaz de visualizar la cabeza de aquel bufón rodando por el suelo. Tras aquella experiencia en Nuevo México, la actriz comenzó a descontrolar su hambrienta curiosidad por saber más sobre ella, su vida actual y las pasadas.

“Un actor tiene muchas vidas y muchas personas dentro de él. Sé que hay muchas personas dentro de mí”- afirma la actriz. Shirley MacLaine ha sido nombrada líder internacional de la Nueva Era, pues la consideran como una mujer con mucho carisma y de atractivas enseñanzas. La actriz ha escrito varios libros sobre la reencarnación y el plan cósmico que ella cree que viene desarrollando a través de los siglos. Ese plan cósmico, según la Nueva Era, viene formándose a través de Moisés, Budá, Cristo, el karma, otros mundos y los ovnis (considerados por ellos como dioses que llegan con carrozas de fuego).

Shirley enseña que “Todos son dios… Yo sé que yo existo, luego yo soy. Yo sé que la fuente divina existe. Él es. Pero puesto que yo soy parte de esa fuerza, yo soy quien soy”. La actriz, muy entregada a su dedicación mística, realiza conferencias y charlas para ejecutivos y universidades en las que anima a imitar a Cristo, ya que él desarrolló su alma progresivamente casi hasta la perfección.

La Nueva Era basa su búsqueda en la armonía cósmica, una conjunción de bienestar entre el espíritu, la salud y el medio ambiente. Es una unión del misticismo oriental con el materialismo occidental, la ciencia, la superstición, el yin y el yan, el espacio, el tiempo, la física, la metafísica, filosofías antiguas y la conciencia nueva. Así que podemos ver que la Nueva Era es un interesante cóctel filosófico, místico y cultural.

Las millonarias ventas de los libros de la actriz, “Lo que sé de mí” y “Bailando en la luz”, han creado una gran controversia, especialmente sobre las ideas que Shirley prodiga. El doctor F. LaGard Smith publicó una critica sobre todo ello bajo el título “¿Tiene razón Shirley MacLaine? Quizás esté… al borde del precipicio”. LaGard no está de acuerdo con la visión de la actriz sobre la vida más allá de la muerte y sus creencias sobre el karma, el espiritismo y los ovnis. El escritor advierte sobre el peligro de los libros de MacLaine, ya que estos han sido tomados como manuales de doctrina sobre la reencarnación.

“No se trata simplemente de uno de más entre tantos libros autobiográficos escritos por celebridades… Una cosa es que una superestrella escribiera algo sobre su creencia personal en la reencarnación y otra que tratara de hacerlo caber dentro del cristianismo”- critica LaGarg.

Lo cierto es que la organización de la Nueva Era ha sido siempre cuestionada y, en ocasiones, acusada de ocultismo enmascarado. La nueva era agrupa el espiritualismo, astrología, experiencias fuera del cuerpo, reencarnación y las disciplinas del ocultismo, como así también técnicas psicoterapéuticas no ortodoxas y aplicaciones pseudo científicas de los poderes sanadores de los cristales y las pirámides.

Algunos practicantes de la Nueva Era, dan mucha importancia a los iconos, a las reliquias, a los sagrados objetos y todos lo que se pueda poner los en venta y que de ganancias: las campanillas del Tíbet, te de hierbas exóticas, las señales mágicas de los viquingos, estimulador solar de energía, las velas de colores para la "cromoterapia", cristales, piedras y una inmensa cantidad de libros sobre el ocultismo, folletos, instrucciones, casetes y videocasete.

En ocasiones, la dedicación de la actriz a proliferar sus creencias ha dado más de un disgusto. Shirley McLaine siente una gran dedicación a adquirir una gran cantidad de rostros populares del cine y no siempre las respectivas parejas ven con buenos ojos la actividad de la actriz.

El multimillonario Richard Cohen, compañero sentimental de Linda Evans (muy conocida por su papel en Dinastía) criticó duramente a Shirley MacLaine por haber contagiado a Linda de su desaconsejable obsesión por la reencarnación. El multimillonario californiano acusaba a Shirley de inspiradora de esa irracional psicosis por lo esotérico que ha invadido Hollywood.

Sin duda la entrañable y veterana actriz Shirley McLaine ya no será recordada por sus excelentes interpretaciones, protagonista de El Apartamento o La Fuerza del Cariño, sino como una auténtica gurú hollywoodense del New Age con sus libros autobiográficos, y su filme, también autobiográfico Cita con los Dioses, auténticos tratados de espiritismo, reencarnacionismo y esoterismo. Shirley será recordada por ser una de las devotas más creyente y popular en temas como los ovnis, el más allá y lo paranormal, especialmente entregada en el conocimiento de sus vidas anteriores...